...Este mismo Jesus, que ha sido tomado de vosotros al cielo, asi vendra como le habeis visto ir al cielo. Hechos:1:11
"GOTAS DE ETERNIDAD"
Sembrando esperanza en los corazones.

Paz Interior.

                                                         




Paz Interior 

Introducción 

No podemos hablar de paz si antes no la definimos y no sin antes poder formarnos una clara imagen de su significado. 

Aunque dentro de los principales temas políticos se toca una y otra vez, este tema no siempre se debe interpretar como lo hacen los medios, ya que esta palabra es muy amplia en su significado.
Se ha politizado y por ende ha perdido su verdadero significado, la paz no se pude traer del exterior al interior, sino que sale del adentro del ser humano hacia afuera. 

No podemos definirla en su totalidad, ya que es una virtud que nace en el interior humano, no se puede vender o comprar, no se puede almacenar o esquivar para tener reservas. Es cotidiano, día a día, que nace y se restaura, es como el aire que respiramos, nunca sabremos donde queda, pero nos hace vivir. 

Si todos deseamos la paz, y los gobiernos aseguran buscarla, ¿Por qué hoy no podemos andar tranquilos por las calles de la ciudad, sin temor de ser asaltados, asesinados o toparse con un mal rato?
¿Por qué en los hogares ya no se respira un aire de seguridad y tranquilidad?
¿Por qué falta la quietud en la habitación de nuestras casas?
La respuesta a todas estas interrogantes no son fáciles de contestar, pero si podemos encontrar motivos por los cuales la paz interna se ausenta de nuestras vidas. 

En el tiempo actual los avances científicos ha mejorado el estilo de vida de las personas, pero aun con todo, solo parece haber traído confort y no ha conseguido traernos la paz tan anhelada. 

Y es que la paz no es solamente ausencia de guerra, si no que va más allá, tiene que ver con nuestro actuar diario, con nuestras convicciones y creencias. 

Por lo cual es un fruto de una actitud interna.

Cuando hablamos de paz interior estamos hablando de la esencia de la quietud, de la tranquilidad; aun estando en medio de la tormenta. 

La paz tiene que ver con lo que tú pienses: El pensar en cosas negativas no ayudan a fomentar la paz. 

La paz tiene que ver con lo que creas: El creer va mas allá de un pensamiento, es saber algo, es conocer y estar convencido. 

Tiene que ver con su actuar: El actuar depende de nuestra personalidad, creencias, conveniencias. 

Una persona que tiene acciones delictivas es seguro que no encontrara tranquilidad en su vida, siempre estará cargado de impaciencia, culpabilidad quizás e inseguridad. 

Su corazón está siempre con una interna preocupación y desasosiego.
Es necesario hacernos una auto-evaluación para poder determinar si hemos sido víctimas de alguno de estos elementos. 

                        Dinamica

De las siguientes sugerencias ¿Cual representa la paz para usted?

Una paloma blanca.
Un barco en alta mar bajo la luna.
La puesta del sol en la playa.
Un nido de aves junto a una caudalosa cascada.
Un niño que duerme en un auto.

De las siguientes ilustraciones marque la que le cause más intranquilidad.

A) La violencia domestica.
B) Discriminación.
C) Inseguridad social.
D) Abuso de autoridad.
E) Una tormenta eléctrica.

           Situaciones externas que nos hacen perder la paz 

Las deudas: Muchas veces las deudas adquiridas en un momento de emoción, luego se convierten en una carga y nos quita el sueño. Aun más aquellas que en vez de bajar comienzan a subir desmedidamente, es el caso de las tarjetas de crédito que lo ofrecen todo, pero en manos no disciplinadas pueden traer un caos económico y por lo tanto robarle la tranquilidad.

La enfermedad: En el momento que el médico diagnostica una dolencia mayor y la salud comienza a quebrantarse, es cuando se da el verdadero valor a la salud y la paz puede desaparecer.


Problemas familiares: En algunos casos los problemas entre la familia, incluyendo los de pareja, se pueden evitar. Pero surgirá alguno que no está en nuestro alcance evitarlo, esto puede traer un clima de insatisfacción, riña, contiendas o discusiones verbales, que no ayudaran en nada a cultivar la paz en el hogar.

Economía deficiente: Esta tiene gran cantidad de causas, sea por pérdida de trabajo, endeudamientos, mal administración de los bienes, entre otros. Las personas que no tienen un sustento económico estable suelen tener más angustias y tensiones.

Problemas laborales: Los tan comunes problemas en el lugar de trabajo ya sea directamente con las jefaturas, compañeros de trabajo o situaciones incomodas por la misma naturaleza de las labores. Sea cual sea la causa el trabajo siempre tiende a dar su cuota de tensión que si no se sabe manejar se puede empeorar las cosas llevando las situaciones difíciles a los hogares. 


    Situaciones internas que nos hacen perder la paz.

El odio: Se refiere a la antipatía o aversión hacia algo o alguien cuyo mal se desea. Este sentimiento trae un desequilibrio en el comportamiento del ser humano, lo cual lo puede llevar a realizar cosas que de seguro traerá consecuencias desfavorables aun mayores.
Falta de perdón: La falta de perdón es una causa frecuente de no poder encontrar la paz, las personas con resentimientos, no pueden ser libres para amar ni para ser amados, los sentimientos negativos lo amarran al rencor, es como sostener una carga de una tonelada sobre los hombros.

Pérdida de valores morales, espirituales y éticos: En el momento que perdemos el afán por conservar los valores, estamos a las puertas de un verdadero desastre interior. La persona que deja de ser sincera, honrada, respetuosa, alegre, fiel, leal, entre otros. No puede ser portador de la paz interna, por lo tanto no la trasmitirá.

La culpabilidad: Esta también ata a las personas y no las deja abrir la puerta al descanso, un individuo que se siente culpable de una acción o acontecimiento pasado, no podrá aspirar a vivir en paz consigo mismo ni con los demás, siempre estará lamentándose de lo ocurrido.

El temor: Es uno de los grandes enemigos de la tranquilidad, tememos al fracaso, a los desastres naturales, a la muerte, las fieras salvajes y muchos otros. Cada persona tiene un temor interno que en ocasiones crece y apaga la confianza, robando la paz interna.


Frases célebres de algunos pensadores en cuanto a la paz.

-Dele la oportunidad a la paz. (John Lennon.)
-El más elevado honor que la historia puede conceder a un hombre es el título de pacificador (Richard Nixon.)
-Jamás habrá una guerra buena o una paz mala (Benjamín Franklin)
-La paz más desventajosa es mejor que la guerra más justa. (Erasmo de Rotterdam)
-Los pacifistas son como ovejas que creen que el lobo es vegetariano. (Yves Montand.)
-No basta con hablar de paz, uno debe creer en ella, no es suficiente con creer, hay que trabajar para conseguirla. (Eleonor Roosevelt.)
-Ojo por ojo y el mundo acabará ciego (Gandhi.)
-Nunca comiences una pelea, pero siempre termínala. (John Sheridan)




-Todos quieren paz y para asegurarla, fabrican más armas que nunca. (Antonio Mingote)
-Cuando los pacíficos pierden toda esperanza, los violentos encuentran motivos para disparar. (Harold Wilson)
-La paz no se vende. (Bono)
-Hay algo tan necesario como el pan de cada día, y es la paz de cada día. La paz sin la cual el pan es amargo. (Amado Nervo.)
Las anteriores frases ofrecen el sentido que tiene la paz para algunas personas de diferentes ideologías políticas, religiosas y culturales.
Pero ahora veamos que dice el Creador de la humanidad en cuanto al tema.



          Obteniendo la paz interior 

Algunas de las formas de obtener la paz es creer que hay alguien interesado en lo que hacemos y que debemos de dar cuentas por eso, si creemos en Dios de alguna manera entendemos que él quiere nuestro bienestar y que además se interesa por cada una de nuestras inquietudes.
No podemos ir más allá de la voluntad divina y todo lo que él hace esta bajo su control, por tanto no debemos preocuparnos por los contratiempos que topemos.

El dejó el consejo escrito para que nos fortalezcamos y en su Palabra leemos:
“Por tanto digo: no se angustien por sus vidas, si tienen qué comer o si tienen que deber; ni por sus cuerpos si tienen que vestir. ¿Acaso no es la vida mayor que el alimento y el cuerpo más que el vestido?
Miren las aves del cielo, no siembran, no recogen, ni guardan en graneros; y sin embargo, su Padre celestial las alimenta. ¿Acaso no vale usted es más que ellas?
¿Y quién de ustedes por mucho que se angustie puede añadir una cuarta su estatura? 

¿Por qué se preocupan por la ropa que vestirán? 

Tan solo observen las flores del campo, de los colores que se visten; ni aun los reyes más ricos de la tierra han podido vestirse así. Y estas flores no trabajan, ni diseñan trajes.
Por lo tanto no se angustien diciendo ¿qué comeremos, beberemos o vestiremos? Porque nuestro Padre Celestial, sabe cuáles son todas sus necesidades.
Por eso busque primero el Reino de Dios, y todo lo demás será añadido”.
(Mateo. 6:25-33.Paráfrasis del autor) 

Desde el punto de vista popular la prosperidad económica, es sinónimo de paz y seguridad.
Sin embargo conocemos personas acaudaladas y por ende con muchos amigos a su alrededor y son los más necesitados de una sombra de paz interior.
En sus corazones cargan preocupaciones, amarguras, odio, infidelidades, y un sin fin de cosas que no los deja poseer la paz interna. 

Pero también existe otro grupo de personas que aunque no tiene engrosadas cuentas bancarias, sí confían en la providencia divina, trayendo esto un sentimiento de gratitud, y amor por aquel que todo lo provee. 

No somos exonerados de dificultades y desasosiegos, pero es diferente enfrentarlos cuando sabemos que somos confortados por la increíble experiencia de paz que revolotea en nuestros adentros. 

Porque los problemas, discrepancias y todos los bullicios de la vida no pueden robar algo que está en nuestro interior y que se ha cultivado por siempre.

La paz se consigue por medio de la oración. La oración es hablar, hablar con el Creador supremo, contarle todos los problemas, dificultades, esperanzas y anhelos.
Es desahogarse con alguien de confianza, y que nos comprende mejor que nadie porque él es nuestro creador, él nos hizo. El conoce tu corazón así como está hoy.
Sabe de tus necesidades, como lo leímos en el pasaje anterior.

¿Dónde se guarda la paz?

¿Quién tiene la paz?

¿La paz se trasmite?

La paz se guarda en el corazón, en la mente, en el espíritu.

Jesús tiene la paz que necesitamos hoy.
El nos ofrece la paz, “Mi paz les dejo, mi paz les doy; yo no se la doy como el mundo la da, no se turbe tu corazón, ni tenga miedo.” (Jn.14:27) 

Por lo tanto la paz se trasmite, de persona a persona. Pero una persona que no la posea no la puede trasmitir.

¿Qué te hace falta para obtener la paz? 

¿Dudas?   escribenos aqui






Teologo: Henry Quesada.
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